BALADA DE HOY MISMO

Como dije algunos post atrás, estoy en un momento en el cual tengo la necesidad de hacer regalos y reconocimientos.

Este post quiero dedicarselo a todos los bloggeros: a Mónica en primer lugar, ya que sin pretenderlo me dio el empuje final para entrar a la "bloggósfera"; a Jenipher, de mis favoritos, la primera. A Ma. Ángeles, por su libertad recién recuperada (y por la maravillosa forma en que relata); a Shadow por su enorme solidaridad y su pluma mágica; a La Sombra por inspirar tanto; a Ana R por la excelente poesía que derrama en la red; a Den por su capacidad de síntesis para expresar (tan dificil de conseguir); a Fernando Bernini por la frescura de su pluma; a Natalia porque gracias a ella "recuperé" algunos versos clásicos; a Angela por todas las muestras de cariño; y a todos aquellos que van por este "sub mundo" (como dice Mónica) "golpeando en todas las ventanas". Espero lo disfruten.



HOY FUI GOLPEANDO EN TODAS LAS VENTANAS

EL SUEÑO TRANCABA OJOS

EL MIEDO ENREDABA ALIENTOS

PERO TODAS, TODAS LAS VENTANAS SE ABRIERON


HOY ME DETUVE EN TODAS LAS PARADAS

UN CHOFER ME HABLÓ DE BARCOS

OTRO DE GOLONDRINAS

NADIE SUPO DECIRME DONDE VIVÍA


HOY BURLÉ TORMENTAS CON LOS AVIADORES

ÉSTE HABLABA DE SU MADRE

ÉSTE FUMABA EN SILENCIO

LA MUERTE ERA SOLO UN CIELORRASO DÉBIL


HOY ME EMPAPARON TODAS LAS LLOVIZNAS

UNA TRAÍA RECUERDOS

OTRA TAN SOLO FRÍO

PERO TODAS ME ALCANZARON PEDACITOS DE CIELO


HOY ME HAN HERIDO EN TODAS LAS BATALLAS

UNA ME HIRIÓ EN LA SANGRE

OTRA ME HIRIÓ EN LA ESPALDA

PERO TODAS, TODAS HIRIERON LA ESPERANZA


HOY FUE GOLPEANDO EN TODAS LAS VENTANAS

EL SUEÑO TRANCABA OJOS

EL MIEDO ENREDABA ALIENTOS

PERO TODAS, TODAS LAS VENTANAS SE ABRIERON


Mauricio Ubal

CANCIÓN DE CAMINANTES

Quiero dedicar este post a Ignacio, alguien con una pluma maravillosa que -lamentablemte para mí- descubrí hace muy poco




Porque el camino es árido y desalienta.
Porque tenemos miedo de andar a tientas
Porque esperando a solas poco se alcanza
Valen mas dos temores que una esperanza

Dame la mano y vamos ya,
dame la mano y vamos ya.

Si por delicadeza perdí mi vida
Quiero ganar la tuya por decidida.
Porque el silencio es cruel peligroso el viaje
Yo te doy mi canción tu me das coraje.

Dame la mano y vamos ya,
dame la mano y vamos ya.

Animo nos daremos a cada paso
Animo compartiendo la sed y el vaso
Animo que aunque hallamos envejecido
Siempre el dolor parece recién nacido.

Dame la mano y vamos ya,
dame la mano y vamos ya.

Porque la vida es poca la muerte mucha
Porque no hay guerra pero sigue la lucha
Siempre nos separaron los que dominan
Pero sabemos que hoy eso se termina.

Dame la mano y vamos ya,
dame la mano y vamos ya.

Talita y La Sombra

Este es un fragmento de la obra de teatro "El vendedor de reliquias" de Mauricio Rosencof, basada en la trilogía de Eduardo Galeano "Memorias del fuego". En este tramo, Talita (uno de los personajes centrales de la obra), se convierte en Sor Juana Inés de la Cruz (niña).
Quiero dedicarle este post a La Sombra, uno de los bloggeros de referencia y preferencia para un servidor.
TALITA -Dios de las campanas, campanas que te anuncian, Dios, las que han enmudecido para siempre, señor, y que en silencio te nombran... No me dejes sola, Dios, que soy tan niña... Mamá... ¡mamá!... Abuelo... ¡Abuelito!. Mamá, nadie, no hay nadie, solo yo y mi sombra. ¿También a tí te han callado? ¿No ríes? ¿No hablas? Eres tonta. Apuesto a que ni siquiera hipas. Yo sí ¡hip! ¿Vamos a jugar? ¿si? ¡Vamos a jugar a que estamos vivas! Y crecerás como yo, a golpes de hipo. ¿No lo sabías? Se crece cuando se hipa. Cada saltito que te de la barriga cuando eres pequeña, es un estironcito para arriba. Me lo enseñó el Abuelo... Con la risa también se crece. Con el llorar, no. El llorar encoge. Por eso las viejitas que lloran en los entierros cada vez son más chiquitas. Y cuando sean más chiquititas serán cucarachas, pobres viejitas, por eso Sombra, no hay que pisar cucarachas.

Liber Falco (2)

Perdona, pero tú no sabes.
¿Sabes lo que es estar solo, solo,
volver a casa a las dos de la mañana,
mojar un pan mohoso, triste y duro,
roerlo solo,
y sentado en una orilla del mundo
ver a los astros que rutilan
y no saber qué preguntar ni qué decir,
y confundir las hambres, y roer solo tú allá....
un pan mohoso, triste u duro?

ALGUNAS PALABRAS (que tampoco alcanzan)



Ya sé que no lo leerás hoy ni mañana









Quién sabe cuándo aprenderás algo más que: "la A es como una casita, la E como una escalera, la I es un palito, la O es redondita y la U como una sonrisa" (y para graficarlo sonreís y me hacés a sonreír a mí).
















En estos tiempos tan abruptos (sobre todo para vos), donde los cambios de situaciones nos obligaron a tanta cosa, debería darme cuenta que -aún exigiendo tu atención para la escuela- bien podría prestarte atención en todo lo demás.







Sucede que a mí también me abruma la realidad. Y la rutina, y mis horarios, y la limpieza de la casa, y la comida, y... ¿para qué aburrirte con todo eso?











Si al fin y al cabo lo que quiero decirte es que desde que llegaste (o desde antes, cuando estabas en los corazones de tu madre y mío, porque como vos bien sabés te llevábamos en el corazón por no poder llevarte en la panza), cambiaste todos y cada uno de mis días.






Quisiera encontrar la forma, el momento, las palabras para que entiendas que cada noche antes de dormirme veo tus ojos, que cada mañana al despertarme miro tu foto en mi cabecera. Que en mi trabajo te tengo en mi escritorio (duplicado), y que cuando dejo de trabajar unos minutos, apareces en el monitor para mi satisfacción (y la de mis compañeros).














Que te conocen en diferentes partes del mundo, y hasta hay gente que te recuerda aunque nunca haya estado contigo.














Que este mundo es algo mejor desde que estás, que sólo yo puedo saber cuán dulce puede ser un beso tuyo o cuánto abrigan tus abrazos.




Que tu voz (con ese tono grave para tu edad) es la melodía mejor cantada. Que tus ojos (dos pelotitas siempre brillantes) me pueden. Que nada (ni nadie) vale para mí lo que valés.


Que abrigarte antes de dormirme y ver tu carita, su expresión de paz, alivia mi día y me ayuda a descansar de noche. Que oírte cuando despertas (con tu grito: "papooooo, ¿me levantás?") y que me des un beso y un abrazo, es la cura de todos los malos humores.





Y que sin importar nada, de todos los momentos que viví, los mejores son los que vivo contigo.


Te amo

--
Raúl

FUERA LOCURA



Fuera locura pero hoy lo haría;
Atar un moño azul en cada árbol.
Ir con mi corazón de calle a calle.
Decirle a todos que les quiero mucho.
Subir a los pretiles
gritarles que les quiero.
Fuera locura,
pero hoy lo haría.
Liber Falco

Piedritas bajo la almohada


Para quienes no lo conozcan, les cuento. Mauricio Rosencof es un escritor y dramaturgo uruguayo. En la década del 60 se integra a la organización guerrillera "Movimiento de Liberación Nacional - Tupamaros". Es por eso que a principios de los años 70 es detenido por las fuerzas militares que en 1973 dan el golpe de estado en Uruguay.

Rosencof (y otros integrantes del MLN - Tupamaros) pasan a ser considerados rehenes por los militares. Son detenidos en cuarteles, en condiciones infrahumanas durante más de una década.

Todo esto no impide que Rosencof mantenga su labor creativa (aún cuando no se le permitía hablar siquiera). Es en esas condiciones que empieza a crear historias, que le "cuenta" a otro detenido en la celda vecina, a través de un "rudimentario código morse", mediante golpes en la pared.

Quiero compartir acá, otro tramo del libro "Piedritas bajo la almohada" de Rosencof, en el cual explica el nombre del libro, a partir de los pocos minutos de visita que le permitían a sus familiares.

Disfrutenlo


"-Tú recordarás -le conté a la hijita- que Pulgarcito, cuando se interna en el bosque, arroja miguitas de pan como señales para reencontrar el camino de regreso a casa.

La hijita asiente, atenta. Quedan pocos minutos de padre

-Pero -agrego- las palomas se comieron las migas y el sendero del retorno se esfumó

Sus ojitos están orillando el umbral de la angustia, que interrumpo con un:

-...pero Pulgarcito no era tonto, y en su segunda incursión por el bosque, se comió todo el pan y arrojó piedritas, que marcaron el camino de retorno

Ahora sonríe

-Pues bien: aquellas piedrecitas, en su casi totalidad -ha transcurrido mucho tiempo, tú sabes- se han perdido. Solo se conservan tres; dos de ellas resguardadas bajo campana de cristal en el Museo Perrault de París

La hijita contempla la pequeña gema que reposa en al palma de su manita

-¿Y la otra?

-Esa -le digo, cuando anuncian el fin del tiempo-. Es la tercera, que descansa en tu mano. Llegó a las mías por misteriosas rutas. Y ahí la tienes. Cuidala

Desde entonces mi niña guarda la piedra de Pulgarcito bajo la almohada

-Para que papá -dice- encuentre el camino de regreso a casa."


INES Y LA ABUELA

Abuela: -Entonces Bambi se durmió solito...
Inés: -¿Solito?
Abuela: -Sí... Aquí dice...
Inés: -¿No tiene abuelita?
Abuela: -Tiene... (Entonces la abuela, disgustada por un final que preocupaba a la nieta, siguiendo el texto con el índice, pero sin leer lo que estaba escrito, inventando otro cuento, como si lo leyera) ... se durmió solito... y vino la abuela y le cubrió los pies con una manta, porque de noche en el bosque hace mucho, mucho frío.
Inés: -¿Y soñó?
Abuela: -(Cerrando el libro) Soñó. Todos sueñan
Inés: - ¿Tú también?
Abuela: -Más que nadie, porque soy muy, muy viejita.
Inés: -¿Y yo también soy muy, muy viejita? Porque sueño todo, abuela, un sueño como verde, abuela, y los animalitos que lo vienen a comer. Y comen y comen, pero siempre hay

(fragmento del libro "Piedritas bajo la almohada" de Mauricio Rosencof)

"Hombre que supo irse en fecha curiosa, aura que dijo"






Esta fecha se ha inscripto en la historia por múltiples motivos.



En general, los medios de comunicación hablarán de la tragedia en las Torres Gemelas de Nueva York. Algunos, rememorarán el golpe de estado en Chile, en 1973.



Acá en Uruguay, los más adictos al deporte (en particular al automovilismo), pondrán su énfasis en el accidente que el once de setiembre de 2001 cegó la vida de Gonzalo "Gonchi" Rodríguez (hasta ese momento la promesa más clara de tener un corredor uruguayo en fórmula 1).



Los menos, recordarán que hace exactamente tres años falleció Julio Cesar Castro, popularmente conocido por su seudónimo JUCECA.



Juceca era portador de un humor desopilante. Si bien lo más conocido fue su personaje Don Verídico (popularizado para el Río de la Plata por Luis Landriscina), Juceca escribió otras historias como "Sediento Jack" en la revista "Guambia", obras de teatro (recuerdo "El Contrabajo Rosado" en Arteatro haciendo gala de un humor absurdo brutal) e incluso fue co-guionista y actor de reparto en la película "El viaje hacia el mar" (basada en el cuento del -también escritor uruguayo- Juan José Morosoli).



Cuando en el 2001 sucedieron los atentados en Nueva York, en Uruguay hubo medios que deslizaron la posibilidad del envío de tropas a Medio Oriente, en función de los acuerdos firmados en la OTAN. Ante esto (y tomando en cuenta nuestra indiosincracia), Juceca publicó el texto que publico a continuación, en el cual desliza su ingenio para hacer humor con una situación -ciertamente- muy conmovedora.



Salud Juceca, tu recuerdo sigue entre quienes supimos soltar carcajadas con tu obra.




"VERDADEROS ATROPELLOS"




Entre los diversos sistemas de defensa que implementa el hombre ante los peligros que muchas veces lo acechan, otras veces lo desechan y no pocas lo cosechan, se encuentra el humor. Dicen que la costumbre de contar cuentos en los velorios se origina en la necesidad que tiene el hombre de espantar a la muerte, de ningunearla en sus propias narices, (o las del finadito, que en paz descanse), y de ahí esa costumbre de faltarle el respeto ya que, por más que insista y se repita, la muerte es un fracaso. Y en este velorio universal que nos han impuesto de banderas a media asta y minutos de silencio (que no pasan de veinte segundos cada uno porque el minuto por televisión es muy caro) no debe faltar el toque de humor que nos ayude a evitar el pánico que está sembrando gente que debiera ser más seria y dedicarse a sembrar algo positivo, como ser trigo y porotos payares. Tener una guerra declarada y no saber todavía a quién, no es serio. Movilizar a toda la marina de guerra para atacar a un país que no tiene costas, no es serio. Saberse y declarase el país más poderoso del mundo (y el más enojado), y pedirnos ayuda a nosotros los uruguayos (que nunca nos enojamos) para ir a un lugar que nos queda tan a trasmano, y justo cuando nos afanaron las balas, no es serio. Mi amigo Mario Delgado (que es mucho más serio) me decía que considera y comprende la tragedia de las Torres Gemelas de EE.UU., pero que en Minas, Departameto de Lavalleja, también vivieron una terrible tragedia cuando el caso de las dos gemelas Torres, las hermanas Maruja y Leonor Torres, dos negras preciosas, a las que también voltearon, en una acción que, al igual que la otra, fue un verdadero atropello. La comparación puede ser cuestionable, pero es hora de respetar no solo al Departamento de Estado de Estados Unidos, y su enojo, sino, también al estado del Departamento de Lavalleja, y su bronca. Porque, al final de cuentas, cada cual tiene las gemelas que puede. Y a nadie le gusta que se las volteen.





--
Raúl

DES CUBRIENDO ME


Desde hace un tiempo, vengo

descubriendo que el

destiempo y el

desencanto son parte medular de cuanto

deseo. No sé cuán grave es,

después de todo, el

desfasaje es otra de mis características

destacadas.

Despertar cada mañana, enfrentar los

designios diarios, la

desidia urbana, la

despiadada realidad...

Despojado ahora de muchas de mis certezas,

despeino mis dogmas, me

desapego de algunos roles y

descarto algunas barajas que hasta ayer

deshacían las estrategias, de cuanto oponente osaba

desafiarme.

Descuidaré así, aquí y ahora mis frentes.

Destaquensé adversarios, esta es su oportunidad



--
Raúl